Cada ama de casa tiene sus propios trucos probados para lavar la ropa y limpiar la casa. Estos trucos para el hogar no sólo te harán la vida más fácil sino que también te ayudarán a ahorrar dinero. Hoy descubriremos por qué se necesita azúcar a la hora de lavar y cómo utilizarla para conservar el color de la ropa y aumentar la resistencia del material.

Maquillaje para proteger el color.

El lavado regular puede hacer que la tela se vuelva opaca, antiestética y adquiera un tono amarillento.   El azúcar permite lavar a fondo la prenda preservando el brillo de los colores.

Para evitar que la máquina “arruine” tu ropa, debes seguir las siguientes reglas:

  1. Clasifique los artículos según el rango de temperatura que figura en la etiqueta.
  2. No utilice blanqueador con cloro ya que daña las fibras de las telas finas.
  3. Elige tu ropa con cuidado para que ni una “cosita” se enrede en ella y la manche.
  4. Si no está seguro de qué programa elegir, elija un programa con una temperatura más baja.
  5. Añade una cucharada de azúcar a la lavadora cada vez.

El azúcar hace que el material sea más resistente.

Las altas temperaturas hacen que las fibras del tejido se deformen, se vuelvan sensibles y se vuelvan muy finas.   Para evitar que las cosas encojan   , conviene añadir azúcar a la lavadora. El producto suave hace que la tela sea más fuerte y duradera. Esto se aplica especialmente a la delicada lana, cachemira y seda natural.

Azúcar en lugar de almidón

Incluso nuestras abuelas usaban azúcar para fortalecer el tul y darle un color blanco brillante. Para conseguir el efecto deseado, se recomienda sumergir el producto en una solución de azúcar después del lavado. Proporciones: 1 cucharada. una cucharada de azúcar por litro de agua tibia.

Cada ama de casa tiene sus propios trucos probados para lavar la ropa y limpiar la casa. Estos trucos para el hogar no solo te harán la vida más fácil sino que también te ayudarán a ahorrar dinero.-3

En tan solo media hora, el tul se vuelve mucho más ligero y rígido y mantiene bien su forma después del secado. Asimismo, puedes almidonar una servilleta tejida o de punto, así como vestidos de encaje.

¡El azúcar no sólo hace la vida más dulce, sino que también la hace más fácil! Y tu pieza favorita seguirá siendo perfecta durante muchos años.