El baño debe ser desinfectado todos los días. Para evitar el uso de productos químicos, afortunadamente, existen muchos remedios. Vamos a ver uno súper efectivo.
El ingrediente para limpiar el inodoro de forma eficaz se puede encontrar en todas las despensas, sin esfuerzo.
La importancia de desinfectar el inodoro
El baño, junto con todas las piezas y en especial el inodoro, debe limpiarse todos los días, con mucho cuidado. Es de fundamental importancia eliminar gérmenes y bacterias. A veces, sin embargo, a pesar de que el inodoro se limpia constantemente y a diario , la porcelana puede volverse amarilla y hacer que la taza luzca constantemente sucia.
Afortunadamente, hay muchas maneras de volver a blanquear la taza del inodoro y desinfectarla al mismo tiempo. No solo productos químicos, por lo tanto, sino también elementos naturales que se pueden encontrar fácilmente en su cocina.
¿Por qué la taza del inodoro se vuelve amarilla? Por las calizas e incrustaciones que al depositarse amarillean la copa. Para evitar este amarilleo, puedes proceder a la limpieza diaria de la taza del inodoro con un solo ingrediente.
Inodoro sucio, el ingrediente para limpiarlo por completo
Muy a menudo, el color amarillento o ennegrecido del inodoro no solo se debe a la suciedad, sino también a la falta de uso de la taza durante mucho tiempo. Entonces podría suceder que llegues a una casa nueva y encuentres un inodoro ya manchado. En este caso, no debe alarmarse.
Solo ve a tu despensa y busca sal gruesa . Es un remedio heredado de nuestras abuelas, ciertamente low cost pero sobre todo ecológico. Todo lo que necesitas son 100 gramos de sal gruesa para verter directamente en la taza. Con guantes para protegerse las manos, trate de distribuir la sal gruesa lo más uniformemente posible a lo largo de las paredes del inodoro. Solo con las manos protegidas por guantes habrá que intentar repartir la sal gruesa sobre todo donde se hayan formado las incrustaciones más graves.
La sal gorda hay que dejarla actuar toda la noche . Es mejor realizar este tratamiento por la noche, cuando no se espera usar el baño. Por la mañana puedes tirar tranquilamente del inodoro. Notarás inmediatamente como tu copa quedará más blanca y como nueva.
Este tratamiento no debe hacerse una sola vez sino periódicamente, al menos cada quince días. Un resultado similar se puede obtener también con el clásico bicarbonato de cocina, utilizado no sólo en preparaciones culinarias sino también por todas sus propiedades. Entre estos, los blanqueadores. Tanto es así que se puede utilizar en la colada pero también en el aseo para dejarlo muy blanco.
Por eso, para prohibir los productos químicos que, quizás, ni siquiera sean tan efectivos como prometen, más vale echar mano de la despensa y confiar en nuestras abuelas y sus remedios naturales heredados a lo largo del tiempo. Trate de creer y nunca volver atrás.
